Mi yo penitente..
Un grito árido claudica alrededor mío. Mi sed se aplaca con tus gotas de rocío. Caprichoso tu viento codicia mi abrigo. Y mi yo penitente se muere de frío. Te presto mis ojos para tallar esa piedra. Te presto mi lengua para que tu boca no muerda. Eclipso a mi antojo tus vanas palabras. Y aparto de ti esas bromas macabras. Convierto en cristal a tu cuerpo desnudo y osados mis labios no pecan de ayuno. Bárbara Himmel2011