Bárbara Himmel

Una estrella que se apaga siempre te ilumina un poco te deja una corazonada de ilusiones lecciones de otras vidas pasadas que no estaban ni pensadas; Fuera de mi experiencia que intenta allanarlo todo no veo el modo de sustituirla, excepto por la mirada esperanzadora de una voz que no se calla y se propaga por la tierra librando mil batallas. Si de callarme he aprendido, más he aprendido de hablar cuando me lo han pedido. No des por sentado encantos que no sabes si has tenido se humilde en tu bondad y repara en los gestos que tengan contigo.

Cuanto ha golpeado el viento en tú cara que te has visto obligado a colocarte una máscara. Llena de envidias y de falsedades más no cualidades te he visto, y he conquistado en mi propia persona aquella virtud del que nunca abandona. Más hoy,lo he hecho aún mas sencillo y he canalizado mis energías en fortaleza, que aunque para nadie sean grandeza son el designio de mi propio destino. Te he acompañado en tú camino, y me has abandonado en el mío, pero el perdón existe desde que fuiste creado y no está en mi juzgarte, ni ser juzgado, para eso solo el cielo te indicará el día y una estrella brillando te devolverá  la vida.