...dejarte ir...
...logré dejarte ir, aunque la tristeza ocasionalmente carcomiera mis sentidos... aunque la tristeza se alojara en lo más profundo de mis ojos y llorara desperdicios de alegría. ...logré dejarte ir, aunque mis traicioneros recuerdos te alentaran a buscarme; aunque lo banal de mi afecto se alojara inexpugnablemente en la humedad de mis adentros. ...logré dejarte ir, cuando, tu infame interior, inexpresivo, menos lo esperaba.